Todos hemos estado esta semana
pendientes de Bankia, la entidad presidida, hasta ahora, por Rodrigo Rato. En
tan solo cinco días hemos observado el desarrollo de los acontecimientos, desde
el anuncio de un beneficio de 304 millones de euros en 2011 a la inminente
nacionalización de la entidad. En este artículo analizaremos, tras una breve
exposición de la historia de la entidad, los principales acontecimientos
sucedidos esta semana.
La historia de Bankia.
Bankia surge a partir del proceso de reestructuración del sistema de cajas
de ahorro. El Banco Financiero y de Ahorros (entidad que engloba a Bankia) nace
a través de la fusión de siete entidades (Caja Madrid, Bancaja, Caixa Laietana,
Caja Ávila, Caja de la Rioja, Caja Segovia y Caixa Laietana). El 2 de marzo de
2011 se presentó el nuevo nombre comercial, Bankia. Finalmente, la entidad
salió a bolsa el 20 de Julio de 2011 con un precio de 3,75 euros por acción
logrando captar 3092 millones de euros.
Los acontecimientos se precipitan hacia
la nacionalización de Bankia.
En este apartado vamos a comentar los principales titulares de los últimos
cinco días. El seis de mayo, Bankia anuncia que propondrá a la junta general de
accionistas el reparto de un dividendo de 152 millones de euros con cargo a los
resultados de 2011 (que como hemos comentado, arrojaron un beneficio de 304
millones de euros). Esta actuación responde a su política de repartir entre los
accionistas la mitad de los beneficios.
Tan solo un día después de este anuncio, se incrementan las especulaciones
referentes a que el Gobierno pretende utilizar dinero público para sanear la
entidad, incluyendo cambios en el Gobierno Corporativo. Se especula que el
Gobierno va a comprar bonos convertibles, con una remuneración del 8%. Se
estima que la ayuda oscilará entre los 7000 y los 10000 millones de euros.
Ese mismo día el Gobierno fuerza la salida del presidente de Bankia,
Rodrigo Rato, justo antes de anunciar un plan de saneamiento. Esta dimisión
"voluntaria" permite que la ayuda a Bankia no sea interpretada como
una intervención. Finalmente Bankia pierde un 3,26% en bolsa.
El ocho de mayo continúa la sangría de
la entidad, precipitándose un 4,76% en el mercado de valores. Al día siguiente, el nueve de mayo, José
Ignacio Goirigolzarri es designado presidente de Bankia, asumiendo asimismo la
presidencia del Banco Financiero y de Ahorros. Toca otro día de fuertes caídas:
la jornada se salda con unas pérdidas del 5,84% en bolsa.
Finalmente el 10 de mayo las especulaciones se materializan: el Gobierno
anuncia la nacionalización del 100% del Banco Financiero y de Ahorros y, por
tanto, de Bankia. Asimismo Luis de Guindos insinúa que será necesario más
capital para sanear la entidad, al reconocer que "se aportará el capital
que sea estrictamente necesario para realizar los saneamientos precisos".
La bolsa celebra la nacionalización experimentando su mayor subida del año ,
pero Bankia sigue cayendo (un 1,17%).
Reacción en la cotización de Bankia.
Desde la salida en bolsa de Bankia en julio de 2011, la cotización ha
descendido un 40%, desde los 3,75 euros actuales a 2,105 (dato final de la sesión
del jueves 10 de mayo). Solo en esta semana, a espera del dato del viernes, ha
caído en torno a un 15%. Esta brusca caída en los últimos días debe achacarse a
la incertidumbre de la situación y el temor por parte de los accionistas de que
se diluya el valor de la acción ante la entrada del Gobierno como nuevo socio
de la entidad.
Un poco para pensar.
Esta semana, tanto en los medios tradicionales de comunicación como en
Internet se ha palpado la indignación ante el rescate, intervención o como
queramos llamarlo de una entidad bancaria, sin poder evitar la reflexión de que
la cifra estimada para rescatar Bankia (10.000 millones de euros) coincida con
los recortes en educación y sanidad anunciados por el Gobierno. Personalmente
no pienso entrar en populismos, pues cualquiera que se precie de entender un
poco de economía sabe que los efectos de permitir caer una entidad bancaria
(incertidumbre, inseguridad, contagio a otras entidades sanas etc.) son mucho
más perversos que la intervención estatal.
Sin embargo, deberían tomarse medidas para evitar un peligroso precedente:
si eres una entidad grande y poderosa, aunque tu gestión no sea la correcta,
jamás te dejarán quebrar.
Asimismo cabe preguntarse por qué una empresa que anuncia beneficios y
reparto de dividendos un día, al siguiente se plantea su nacionalización. Esta
paradoja se debe a prácticas de dudosa ética. Un claro ejemplo se ofrece en el
artículo publicado por el diario Expansión La auditoría destapa un nuevo
'agujero' en Bankia de 2.500 millones en el que se afirma
que "el Banco Financiero y de Ahorros (BFA) ha contabilizado activos fiscales
por las pérdidas incurridas", es decir, se están contabilizando 2500
millones de impuestos como activos fiscales al considerarse que vayan a
ahorrarse en el futuro. Sin embargo, "para ahorrarse estos
impuestos deberían producirse importantes beneficios en los siguientes años y
el auditor no está convencido de que vaya a ser así".
Publicado el 14 de Mayo 2012
Por nuestro colaborador Eduardo Martínez
también en eduardomartinezblog.com
Por nuestro colaborador Eduardo Martínez
también en eduardomartinezblog.com